Al consultar a una inmobiliaria si tiene un departamento para alquilar, se obtiene la misma respuesta: “No tengo disponibilidad” o “Se va a desocupar uno en abril, pero hay lista de espera”.
Al consultar a una inmobiliaria si tiene un departamento para alquilar, se obtiene la misma respuesta: “No tengo disponibilidad” o “Se va a desocupar uno en abril, pero hay lista de espera”.
Al consultar a una inmobiliaria si tiene un departamento para alquilar, se obtiene la misma respuesta: “No tengo disponibilidad” o “Se va a desocupar uno en abril, pero hay lista de espera”.
Al consultar a una inmobiliaria si tiene un departamento para alquilar, se obtiene la misma respuesta: “No tengo disponibilidad” o “Se va a desocupar uno en abril, pero hay lista de espera”.
Al consultar a una inmobiliaria si tiene un departamento para alquilar, se obtiene la misma respuesta: “No tengo disponibilidad” o “Se va a desocupar uno en abril, pero hay lista de espera”.
Al consultar a una inmobiliaria si tiene un departamento para alquilar, se obtiene la misma respuesta: “No tengo disponibilidad” o “Se va a desocupar uno en abril, pero hay lista de espera”.
Al consultar a una inmobiliaria si tiene un departamento para alquilar, se obtiene la misma respuesta: “No tengo disponibilidad” o “Se va a desocupar uno en abril, pero hay lista de espera”.
Al consultar a una inmobiliaria si tiene un departamento para alquilar, se obtiene la misma respuesta: “No tengo disponibilidad” o “Se va a desocupar uno en abril, pero hay lista de espera”.
Al consultar a una inmobiliaria si tiene un departamento para alquilar, se obtiene la misma respuesta: “No tengo disponibilidad” o “Se va a desocupar uno en abril, pero hay lista de espera”.